Ley Segunda Oportunidad Córdoba

Con el asesoramiento de un despacho con experiencia, la solicitud se presenta ante el juzgado mercantil. Nosotros nos ocupamos de todos los trámites necesarios para que no tengas que preocuparte por nada.

Será necesario reunir documentos que acrediten tu insolvencia. Deberás presentar tu situación personal, ingresos, gastos imprescindibles, cargas familiares y las deudas que has contraído. Así se justificará tu imposibilidad de hacer frente a los pagos.

Desde nuestro despacho, y siempre que nos des tu autorización, nos encargamos de recopilar casi toda la documentación necesaria para iniciar el proceso, lo que hace que todo sea mucho más sencillo para ti.

El proceso suele durar entre seis meses y un año, dependiendo de lo complejo que sea el caso. Contar con abogados expertos permite acelerar cada fase del procedimiento judicial.

Una vez que finaliza el trámite legal, todas tus deudas se eliminan. A partir de ahí, podrás volver a acceder al crédito y empezar de nuevo sin ningún tipo de carga económica.

Hay que tener en cuenta que, si te perdonan todas tus deudas y los acreedores no cobran, no sería justo que conservaras, por ejemplo, un coche valorado en 20.000 euros. Lo normal es que se venda y se reparta el dinero entre los acreedores. Lo que falte, se perdonará y después podrás adquirir otro coche.

En cuanto a los avalistas, aunque tus deudas se cancelen, los acreedores pueden seguir reclamando a quienes avalaron tus préstamos. Por eso es fundamental revisar todas las deudas con atención para evitar perjudicar a terceros.

En algunos casos es posible mantener tu vivienda habitual, siempre que cumplas requisitos como que la hipoteca sea superior al valor de mercado. La última palabra la tendrá el juez, y por eso hay que estudiar bien cada situación donde haya un inmueble familiar.

Con la reforma reciente de la ley, ya no es obligatorio pasar por un acuerdo extrajudicial de pagos. Todos los planes deben gestionarse dentro del procedimiento judicial y se adaptan siempre a tu capacidad económica real.

Si no lo hacen, puedes ejercer acciones legales para garantizar que tu nombre se elimine de esos listados. Así podrás recuperar tu normalidad financiera y acceder a productos como créditos o cuentas bancarias.